lunes, 22 de febrero de 2010

El amor no se jubila

Acabo de coger el autocar, el día esta lluvioso, el olor a tierra mojada es intenso, es un motivo para transportarme a mi adolescencia, el autocar arranca, reclino mi cabeza sobre el cabezal entorno los ojos y dejo correr mis recuerdos de juventud.

Este viaje me sitúa en aquellos años sesenta de emigración hacia otras zonas en busca de trabajo y bienestar, atrás quedan tus recuerdos, de momentos inolvidables junto a tus seres queridos, de ese amor de tu niñez de la niña que te hace tilín a la que no puedes quitar de tu cabeza por mucho que te lo propongas, la despedida ha sido triste, ese primer amor que te ciega, te atonta, y no puede evitar que tu corazón se acelere a una velocidad vertiginosa, esos amigos de la infancia con los que has compartido pupitre , juegos, tertulias y fantasías, despertar a la sexualidad de una manera encubierta por ser tabú para la época o mejor dicho “pecado mortal”,donde los niños con los niños y las niñas con las niñas, tiempos de romanticismo, donde ese pañuelo impregnado de colonia que conseguías birlar a la chica que te tenia loco de atar , lo sacabas en la intimidad para olerlo y te permitía hacer volar tu imaginación, poder acariciar sus cabellos disimuladamente, poder tirar de su lazo para desatarlo y atarlo a la baranda del paseo, y adivinar en su rostro el cabreo y ver como se fijaba en ti, esos momento de atención se prolongaban en tus recuerdos, alimentando tus fantasías.

Ese muro que supone la distancia, que tratas de romper, a través de esa carta diaria, tratando de desahogar ese fuego tan intenso que invade tu corazón y dulcifica tu celebro, la impaciencia de la repuesta que al abrir el buzón acelera tus pulsaciones a medida que rompes el sobre y comienzas a leerlo ávidamente, y la sonrisa se dibuja en tus labios, los días se hacen largos e interminables pensando en esas vacaciones que no acaban de llegar y cuando por fin llegan el tiempo no se para al contrario vuela y cuando te das cuenta te tienes que separar, volviendo a empezar con ese juego amoroso que solo te permite tu pluma.

Ahorrando y pensando en ese día que por fin tu economía maltrecha te permita unirte de por vida a esa mujer que adoras, para formar una familia para después esperar con ansias la llegada de tu primer hijo sacrificarte para que el no pase por lo que nosotros hemos tenido que pasar.

El autobús acaba de hacer una parada, abro los ojos, miro a mi alrededor a mi lado permanece esa fiel compañera de mi vida, a la que sigo adorando a pesar de los años transcurrido, estamos jubilados que mayor ilusión compartir estos momentos el uno junto al otro, momentos de sosiego y divertimiento cosa que nuestro padres no pudieron permitirse nunca.

El autocar emprende su camino, esta parada me ha hecho volver a la realidad, planteándome unas preguntas, ¿la sociedad ha cambiado?¿para mejor o peor?.Yo creo que para peor en cuanto a la familia,¿se ha perdido el amor? ¿es bueno perder el romanticismo?¿es bueno pasar de todo?, ¿o por lo contrario, estamos caducos nosotros?.

Estoy de acuerdo con las libertades pero dentro de un respeto y hacer prevalecer el amor por encima de todo, no hay nada mas bello que mirar a tu lado y ver que esas arrugas en el rostro de tu adorable viejecita se han forjado a tu lado y que para ti sigue siendo la mas bella del mundo.

Jubílela 65.

lunes, 15 de febrero de 2010

Palabras

Pétalos de rosas son tus besos. Lluvia de otoño con olor a tierra mojada. Néctar de dioses que endulza con tibio licor los labios que el tiempo resquebraja sin remisión. Llama que no se apaga en la noche oscura que precede a la noche eterna, la que cada día acorta indiferente su distancia, cercándonos, cerrándonos la salida. Poco importa que el tiempo nos asedie inmisericorde. Días luminosos suceden a otros, grises y anodinos, que se perpetúan en una cadena de incierto final. Qué más da que el horizonte se enturbie con crespones violetas de sombrías premoniciones y oscuros presentimientos, si del frutal de tus pechos ardientes crepitan ascuas que irradian luz. Si de tus muslos vivaces palpita la llaga cuya marca es invisible, más eleva hacia lo alto un latido de piedra ancestral que sabe a mar y a ambrosía. Gotas minúsculas que caen y se precipitan de la bóveda celeste cual estrellas fugaces que ningún ojo puede ver y que me recuerdan a cada pulso que yo te quiero y que tal vez te quise, y que tal vez vuelva a quererte. Que de tus labios entreabiertos y húmedos me quedé prendado para siempre, uncido por un cordel invisible a la seda de tu piel, que me trae a la memoria el sonido y el olor de lluvias antiguas y remotas, que emanan sin saberlo de tu herida abierta , que nos funde y nos confunde en cada encuentro fugaz . Una lengua de fuego que desafía a las tinieblas, que arderá, paciente y lenta, cuando ni tú ni yo estemos. Una dulce llamarada incandescente sin principio, sin final.

CYRANO

Volver

Hola Julia:

Sé que te extrañará recibir mi carta de hoy después de tan larga ausencia.

¡Han pasado muchos años!... Parece que fue ayer cuando nos obligaron a separarnos por mezquinos intereses impuestos contra nuestra voluntad. Quizá la culpa fue de aquella Sociedad tan cargada de prejuicios. ¡Éramos tan jóvenes!...

Bien sabes que tuve que abandonar la tierra que nos vio nacer por motivos que no es necesario volver a recordar. Fueron muchas las cosas que quedaron atrás: raíces, amigos. Sobre todo, aquella bonita y primera ilusión que había nacido entre nosotros.

A partir de entonces he conocido gente. Otras mujeres, por qué no decirlo. He pisado sobre mil caminos, pero ninguno de ellos me ha guiado hacia esa felicidad que todos deseamos.

Pero no quiero hablar en estos momentos, para mí mágicos, de circunstancias irremediables del pasado. Quiero mirar hacia el futuro diciéndote, que no ha pasado ni una sola noche durante toda mi vida errante, que no te haya encontrado entre mis sueños, recordando con cariño aquella sonrisa alegre de niña mujer. Tu mirada tierna, limpia. El color azul-mar de aquellos ojos de expresión sincera.

¡Cuantos recuerdos!... rebosantes todos de ese sentimiento noble, inexplicable, salido del alma.

Como ave migratoria que al final de sus días busca siempre el lugar donde hizo su primer nido, atraído por no sé que fuerza, quiero que sepas que he vuelto a mi tierra, nuestra tierra,. Me encuentro de nuevo en la ciudad, donde pienso volver a plantar definitivamente aquellas raíces arrancadas de forma tan brutal.

Desde mi regreso, he visitado una y otra vez cada uno de los lugares que tanto significaron para nosotros: la arboleda dónde aquel atardecer ya tan lejano, cogí por primera vez tu mano… el banco en el que de forma furtiva, se rozaron torpemente nuestros labios ¡Cómo recuerdo el rubor de tus mejillas!... Tiempo pasado que ya nunca volverá.

He sentido mucho interés por conocer tú actual situación personal. Sé que tampoco te has casado, encontrándote al parecer sin lazo ni vínculo con ningún hombre.

Resultaría impropio, cursi tal vez, expresar a mi edad con palabras, lo que siento en estos momentos. Sólo me atrevo a decir que me haría mucha ilusión volver a verte, pasear de nuevo bajo aquéllos árboles... Hablar de tantas y tantas cosas que, aunque nunca vieron la luz, aún se encuentran guardadas en el fondo de mi corazón… Intentar por fin, recuperar a tu lado todo este tiempo perdido.

Espero tu respuesta.

Trotamundos

Gracias por existir

Querida / o mía / o,

Gracias por existir, gracias.

Gracias por fijarte en mi, por dejarme disfrutar de tu presencia, por mirarme
y por hablarme.

Gracias por dejarme soñar contigo, por hacerme vivir de ti, por provocar la
ilusión que lleva tu nombre.

Gracias por elegirme, elegirme para acompañarte, elegirme para caminar juntos
por la vida, elegirme para sentir.

Gracias por respirar, andar, mirar, hablar, despertar, sonreír, escuchar....
gracias por existir.

Gracias y un millón de gracias por dejarme amarte.

Gracias

Quiero regalarte mi vida

Quiero regalarte mi vida, darte mis segundos, entregarte mis sentimientos y compartir mi ser contigo.

Quiero que siempre estemos juntos, que no nos faltemos ni un instante. Deseo soñar con darte la mano para siempre.

Quiero que sepas que amarte es sentir, que quererte es abrazar la vida y que tenerte es respirar.

Quiero que comprendas que te amo, que te pido que nunca me abandones. Quiero darte lo que tengo y quiero entregarte mi amor.

Dos segundos desde que te perdí; y cinco años que vives en mí. Sigo detenido en la estación de tu ser a la que llamo "ilusión", y viviendo en la de mi mente, a la que nombro "esperanza".

Dicen, que el periodo de vida de las relaciones, son como un tren de largo recorrido; el problema es saber donde bajarse. Yo un día me baje en la tuya después de pasar por varias estaciones en blanco y negro. Recuerdo ahora cuando observé cómo las agujas de la intuición cambiaban, desviando el tren a tu vía, viajaba cansado y oxidado.

Cerca estaba tu estación, repleta de seres con miradas de curiosidad, pegadas todas ellas a los cristales de la envidia, y la discordia.

Días antes, tuve una premonición: el revisor claveteaba en mi mente-próxima estación:¡Ilusión!, Mi tren provenía del "sexto sentido".

Por fin, posé mis pies en el andén, miré el reloj que marcaba tres minutos y cuarenta segundos de adelanto, el tiempo necesario para enamorarme de ti... y allí, mismo comenzaron a trabajar los cerebros, entretenidos en confeccionar su mejor obra: el conseguir conectar nuestras miradas, prohibiéndoles separarse.

Estabas frente a mí, divino pecado del hombre, con gestos suaves y meditados… en esas horas se anunciaba ya la noche, que clamando a la luna, le pidió que iluminara aún más tu rostro.

La maquina de supervivencia, en la que me había convertido últimamente dejó de funcionar, en aquel período canicular, en que te conocí. Trás descargas de felicidad y escalofríos, débil y desarmado, símil caballero abatido, arrojé el yelmo, al palenque, "inútil pensar"…¡ ya no era dueño de mi!.

Con los días, tu perseverancia y mi morbo fueron más protagonistas que la razón, absorbiéndola en cada momento.

Amor: el jefe de estación nos llamaba a gritos, quería que le obedeciéramos, y absortos caímos en el abismo de lo desconocido. Enrocando tu mente, te aliaste a él, y con sutilezas de mujer, penetraste en mis filas. Un día, terminado ya mi tiempo de jovenado, paseando por el parque del querer, con risas de complicidad, entre pinos imponentes, viviendo mí lucha ético-carnal, te invite a que escucharas a este simple mortal mientras té susurraba fragmentos de los libros, de mi retórica perdida... Y habiéndote acabado de pronunciar el ultimo poema de amor, mis indignos labios besaron los tuyos, sellando así la doliente despedida, de un amor imposible.

Pero…fue entonces cuando mi pituitaria inhalo el placer, y borrachos de deseo carnal, por última vez sobre el manto blanco que cubría hacía días el condado, entregamos nuestros cuerpos al delirio.

Al día siguiente, entre sollozos me llamaste. Repitiéndome que había sido una locura, que tomáramos la sexualidad como placer...Dejé de verte, de escucharte, pero no de sentirte, desapareciste de la faz de la tierra...

La ausencia de "Ilusión" comenzó a ser para mí, como un agujero atravesándome el pecho, no perdí la fe de volverla a ver, es por ello que permanezco oculto en uno de los vagones de su estación, angosto en la vía de la apatía, escribiendo cartas sin final, ¡esperando una señal!.

Terminé una de mis cartas al quedarme dormido, y soñé; como cada mes una rosa, sin importar matices, ni colores, era depositada en tu camarote, que descolgábamos el teléfono, ganándole la carrera a la soledad, llevando la palabra al ser querido, y como en nuestras mutuas preguntas incontestadas, continuadas de silencios, nos queríamos, sin querernos.

En una noche de luna llena, te llame para ponerte a prueba en un deber a cumplir, sin imposición: debías salir de tu hogar, alejarte unos cientos de metros de la monótona ciudad, adentrarte en el bosque, y una vez allí; mientras colocabas tus brazos en cruz, sentir la brisa fresca, en tu rostro escuchar al silencio como respiraba contigo suavemente, y al ver nacer al sol de su sueño, regresar rápidamente al hogar, y escribir lo primero que te viniera a la mente, dedicándoselo al amor... obedeciste, sin tener porque y esa madrugada escribiste una sincera carta de amor dedicada ...cosa que yo no supe, de su existencia hasta que me confesaste que la habías enterrado junto a la promesa de volver, cuando las miradas de curiosidad y los miedos perecieran en el mismo lugar, en que un día, de despedidas, pedimos un deseo a la Virgen Patrona.

Ahora, transcurrido un tiempo; despierto, en la oscuridad de mis letras, después de dos segundos de ausencia, y cientos de cartas inacabadas. Te he vuelto a encontrar; bella, radiante como siempre, escuchando; entre clarines y clarinetes, en el interior de los portones de la sabiduría como, nacía una marcha triunfal, que invitaba a cerrar los ojos sintiendo mil sensaciones: entre ellas la alegría. Me miraste a los ojos, viendo los míos humedecidos en lágrimas y acercándote a mí me dijiste: he vuelto a buscarte, dejando para siempre atrás mis miedos. Coge mi mano y sal de ese vagón de silencios. Haz caso al jefe de estación que nos da la ultima oportunidad de subir al tren destino "futuro", y alejándonos de aquí. Unamos nuestras almas, y viajemos de estación en estación, por ese jardín ferroviario llamado mundo.

"Que la "esperanza" disfrute de una rosa inmortal y de su "ilusión" incombustible."

Se sentó en el despacho, todavía con el pelo empapado y agarrando la taza de malta, que se había preparado, sorbió de ella, levantando la cabeza miró a la pantalla del ordenador, y con esa sonrisa que portaba desde el bosque de pinos, escribió al amanecer, sus ojos atravesaron, las gotas de lluvia nueva, buscando más inspiración en la sierra próxima, de donde acababa de llegar; escribió más segura que de costumbre, con palabras dictadas por el amor que sentía, como si supiera de memoria aquella historia tantas veces soñada, pero que aún no se había animado a escribir...¡esta vez era distinto!...no era algo idealizado por ella, no era una más de esos pensamientos que ella tejía en su cabeza, plasmándolos en el papel y que acababan por deprimirla...;


Dos segundos desde que te perdí, y cinco años que vives en mí.


FugazNazarí

Mi ángel se ha marchado

NO QUIERO PREGUNTAR POR QUE DE TU ABANDONO, POR QUE SÉ QUE NO TENDRÉ RESPUESTA.
SOLO QUIERO CONTARTE TODO LO QUE TE HAS PERDIDO:
HA NACIDO UNA ESTRELLA DE MI VIENTRE
UN MILAGRO INCREIBLE DEL FRUTO DE MI AMOR FLORECIDO,
YO QUE QUERIA DECIRLE A DIOS LO FELIZ QUE ERA ,ÁNGEL MIO,
Y TE HA LLEVADO CON ÉL, DEJANDOME A MI EN EL OLVIDO.
SI SUPIERAS QUE GANAS TENIA QUE ME VIERAS VESTIDA DE BLANCO
Y ENTRAR EN LA IGLESIA ORGULLOSA CONTIGO,
MALDITA SUERTE QUE ENVIDIA LE HA DADO
Y ME DEJA EN SOLEDAD ...EL MAYOR DE LOS CASTIGOS.
TODAVIA HOY NO PUEDO CREER QUE TU MI ÁNGEL TE HAS MARCHADO
DEJANDOME EN DESCONSUELO IMPOTENCIA Y DESATINO,
SIN PODER LLEGAR A COMPRENDER LO QUE EN ESTE AÑO HA SUCEDIDO.
MI VIDA LA LLENA MI PEQUEÑA ESTRELLA,(QUE ORGULLOSO PAPA TE HUBIERAS SENTIDO)
SU CARITA TAN DULCE, TAN LLENA DE VIDA,TAN FRÁGIL PARA ESTA DURA VIDA...
QUE ME DA MIEDO NO PODER CONTAR CONTIGO
PARA QUE ME GUIES COMO SIEMPRE LO HAS HECHO
Y LLENES DE CONFIANZA Y SEGURIDAD MI CAMINO,
¿CUÁNTO TE ECHO DE MENOS? ÁNGEL MIO,
SOLO ME FALTÓ UN MOMENTO ANTES DE MARCHARTE
PARA QUE SUPIERAS LO QUE TE HE QUERIDO Y QUE TODAVIA AÚN TE QUIEROY NO CREAS QUE TE OLVIDO
SIEMPRE ESTARAS EN MI RECUERDO
AUNQUE YO SÉ QUE TE HE PERDIDO.
CUANTAS COSAS PIENSO AHORA QUE PODIA DECIR Y NO HE DICHO
CUANTOS BESOS Y ABRAZOS ME FALTARON
CUANTOS MOMENTOS PASARON DE LARGO
CREYENDO TENER TODA LA VIDA PARA VIVIRLOS.
PORQUE SOLO SE ACUERDA UNO DE ELLO
CUANDO AL FINAL YA NADA TIENE SENTIDO,
SOLO QUIERO QUE OJALA RECIBAS MI CARTA ALLÍ EN EL CIELO MERECIDO,
Y DESCANSES DE ESTA VIDA INFIEL QUE TANTO MAL TE HA OFRECIDO
Y QUE MI ESTRELLA TE ALEGRE CADA VEZ QUE DESDE EL CIELO LA VEAS POR UN AGUJERITO.TE QUIERO PAPÁ.

Ángel Blanco

jueves, 11 de febrero de 2010

¿Por qué? No lo sé…

No me preguntes porqué,

Te he comenzado a querer,

Pues tan sólo yo ni lo sé,

Ni lo imaginé, ni te esperé…

Como el rocío de la mañana,

Como la brisa fresca entra por mi ventana,

Llegas a mí, envolviéndome

Con tu mirada.

No puedo hacer nada,

En mi mente ya estás,

No te puedo silenciar,

Con mis ojos te comienzo a soñar.

Creces en mí interior,

Me inundas de amor,

No puede ser un error.

No, esto es amor.

Me ayudaste a despertar,

Tú, eres mi única verdad.

Cógeme de la mano,

Enséñame a caminar.


No me preguntes porqué

Te he comenzado a querer,

Pues tan sólo yo ni lo sé,

Ni lo imaginé, ni te esperé…

A veces me pregunto

Si eres real,

Si de verdad me quieres amar,

O si juegas conmigo nada más.

Sí. A veces, me haces dudar.

Tengo miedo a equivocarme una vez más,

Tengo miedo de perder mi soledad,

Pues mi corazón débil, lo puedes lastimar.

Yo sé que eres genial.

Es por ello que por ti, me quiero arriesgar.

Quiero ganar tu apoyo, tu entrega, tu amistad,

Tu cariño, tu amor, tu felicidad.

Deseo hacerte llegar, mi mensaje especial:

Quiero darte las gracias

Por los momentos tan maravillosos que me das,

Porque me llenas de vida, me inundas de paz,

Porque me colmas de alegría, de energía, de felicidad.

Ahora que me enseñaste a volar,

Ahora que mi ilusión no la puedo controlar,

No me quites las alas,

Volemos juntos, juntos hacia la eternidad.

Moon

Siempre

Mi sangre te está llamando, si sonara el alma ella también te llamaría con voz desgarradora. En mi pecho, fragua más ardiente que la de Vulcano, cada martillazo pronuncia con gran eco tu nombre, cada átomo de mi ser está encadenado a ti desde el día aquel en que te dije “por siempre”…”por siempre”… No existe montaña tan alta ni océano tan extenso ni dioses tan poderosos como para hacer que mi ser no vibre atraído por ti y mi promesa, “por siempre”.


Viviendo con las brumas de los sueños y soñando con el amargor de la vida, buscándote, buscándote noche y día, sin llegar allí donde estas, sin lograr alcanzarte, no descansaré hasta el día en que llegue hasta ti, porque tarde o temprano llegaré para estar contigo y quedarnos los dos, y ya nunca habrá distancia ni nos separaremos más.

Cada instante aquí, cada segundo, es como una eternidad en el Hades, lánguido y herido, por incumplir mi promesa, en lo más profundo de mi ser, tan profundo que ya no se distingue si es mi ser o la infinita soledad desangelada y eterna del Universo…El Universo, cruzarlo será el primer paso en mi carrera irremisible hacia ti; ¿Dónde empezará? En el cadalso, bajo el frío acero, por mi mano o si la cobardía se hace hueco en mí partiré de un jergón donde yo quede viejo y deshecho, pero sea como sea, cuando me consuma cuando los cuervos hagan su festín, no me estarán corroyendo, me estarán liberando, se blanqueará mi carcasa al sol y mi cráneo sonreirá sardónico al espacio vacío, por que al fin cumpliré mi promesa, espérame, voy junto a ti.

Viriato

miércoles, 10 de febrero de 2010

Viviendo un amor a escondidas

Querida Sara:

Nuestra historia de amor ha empezado bajo el manto de una enorme tormenta que, para muchos amantes, sería insalvable; pero no para mí. Te demostraré que mi corazón no es de los que huyen de las tormentas del amor y de la vida. Sé que esta tormenta pasará y nuestro cielo, ahora tan gris y sombrío, se transformará en un hermoso cielo azul, claro y soleado, que será tan hermoso y placentero que sentiremos que ha valido la pena esperar y luchar contra la tempestad. Así ha de ser, mi niña, porque yo te lo prometo y porque sé que Dios nos ha bendecido con este amor.

¿Sabes, Sara? A veces creo saber lo que le pasa a tu padre. Pienso que él no quiere que te enamores porque para él, sigues siendo su niña pequeña; esa a la que contaba hermosos cuentos mientras mecía suavemente en sus brazos, esa niña a la que cada noche, con ternura arropaba, y a la que cada mañana, acariciaba su pelo y le daba pequeños besos en la cara hasta que despertaba. Seguramente pensará que el día que te enamores, besaras al chico de tus sueños y eso le hará darse cuenta de que aquella niña tan pequeña, a la que tanto cariño y cuidados le dio, hoy es toda una mujer. Me gustaría que comprendiera que amar a una persona, es mucho más que besarla. Amar, es coger la mano de la persona amada y sentir que el tiempo se ha detenido. Amar, es mirar a los ojos a la persona amada y no decir nada y, aún así, saber lo que siente su alma. Yo te quiero, lo sabes, ¿verdad?, y sé que tú a mí, también me quieres. Si cojo tus manos, siento que el tiempo se ha detenido. Me abrazas y besas mis mejillas y tus abrazos, son calidos y envolventes y tus besos, son tan dulces como la miel. Cuando me miras, tus labios sonríen pero tus ojos, por mucho que sonrían tus labios, tus ojos están tristes. A simple vista se nota que tienes esperanza de que nuestro amor venza a las vicisitudes. Sin embargo, en tus ojos, que son el espejo de tu alma, puedo sentir que hay una pena muy grande. Creo que sé lo que te pasa. Seguramente pensarás que nos vemos tan poco que, cuando estamos juntos, nuestros breves encuentros tienen que estar llenos de alegría, sonrisas y esperanzas en un futuro en común mientras tú, destruyes tus penas en soledad. No tiene que ser así Sara, ¡de ninguna manera tiene que ser así! Si la próxima vez que nos veamos tienes miedo, estás triste o te preocupa algo, ¡dímelo!, y si tienes ganas de llorar, ¡llora! Nuestros encuentros serán igual de perfectos de todas formas porque, al fin y al cabo, estaré contigo. ¿No recuerdas porque te dije que te quería y siempre te querría? Sara, mi niña. Para mí tú lo eres todo y eso nunca cambiará.

Te quiero y siempre te querré, en los buenos momentos y en los malos; porque tu vida es mi vida, porque tu risa es mi alegría y si la próxima vez que nos veamos en tus labios no hay una sonrisa sino tristeza y de tus hermosos ojos brotan lágrimas, no te preocupes; secaré tus lágrimas, te abrazaré muy fuerte y te susurraré al oído lo que por mucho que cambie nuestra vida, nunca cambiará. ¿Sabes lo que es? Muy pronto lo descubrirás.

Sara, eres tan guapa, inteligente, divertida, eres tan…especial. No puedo imaginar mi vida sin ti. ¡Animo Sara!, muy pronto estaremos juntos para siempre pero, mientras tanto; espera mi amor, espera con esperanza, que yo haré que tu corazón, no se canse de esperar. Juntos para siempre.

Javier

Posdata: Voy a decirte algo que nunca cambiará: mi amor.

ROSA DE TÉ

Querido Alejandro

En estos momentos son casi las doce del mediodía de San Valentín. Día esperado por lo que significa. Nuestra unión como pareja cumple su cuarto aniversario. En esta fiesta que por tantas razones nos toca el corazón.

Me he atrevido a escribirte un pequeño poema que ahora deslizaré en el bolsillo de tu chaqueta, intentando con él agradarte y ponerle una pequeña sorpresa a las primeras horas de este día.

Te beso y me besas.

Cuando te beso me besas,

cuando me besas, te beso.

Saltan de la boca que besa y beso

ramilletes crecidos,

plenos de besos.

Saltimbanquis en boca,

que besa y beso.

Si me besas, te beso

si te beso, me besas.

Deshojamos los labios

prietos de besos.

Y en los revoloteos,

de tus besos y mis besos,

los besos furtivos.

Hoy, hoy están presos.

De MARISOL para ALEJANDRO. Un beso.

Alejandro en la tarea de buscar tu americana en el armario con el propósito de sorprenderte con el hallazgo de mi pequeño poema, me ha “sorprendido el hallazgo” de un pequeño libro nuevo y desconocido para mí. Tanto su cubierta como su existencia son una novedad. Sus hojas, algunas aún en blanco, me revelan que no es otra cosa que un diario. Posiblemente tuyo. Aún no puedo salir del asombro al imaginarte, ensimismado, intentando llenar sus páginas níveas y retadoras, con frases y pensamientos personales.

Efectivamente, observo tu caligrafía con emoción primera y me dejo llevar por la curiosidad. Mis ojos recorren con avidez los párrafos de las primeras páginas uno tras otro.

Marisol, me figuro que acabas de encontrar tu regalo de aniversario, yo te he imaginado muchas veces, mientras lo escribía, ilusionada con su lectura, eso me ha dado inspiración para hacerlo.

Sabes lo poco acostumbrado que estoy a mostrar mis sentimientos de forma hablada o escrita y reconozco la importancia que tiene para ti el que yo de este paso. Lo voy a hacer en un intento de acercarme un poquito más a tu esencia. A pesar de mi torpeza oral y de la falta de tiempo para escribirte unos poemas. Aquí estoy intentando responderte a mi manera, a lo que tantas veces me has preguntado. ¿Cómo definiría yo el amor?

Para mí el amor es adolescente, algo inmaduro y excitable. Una mezcla de confusión y arrebato. No conoce edad ni condición social. Actúa desde la niñez y jamás aprende. Nos amamos una y otra vez puramente, erróneamente e ignorantemente.

No existen “mentes” privilegiadas para el amor, ni cargadas de un sentido común extraordinario. Ni mentes racionales que se puedan echar a la espalda el amor. Ni el más platónico. “Así comenzó el nuestro, te recuerdo”.

Si los que se enamoran son los demás a veces vemos en ellos producirse este amor. Como tampoco les avisa, les sorprende por lo novedoso, como nos ocurrió a ti y a mí Marisol, quizá por eso se tarde tanto en ponerle palabras a lo que se siente. A lo que sentíamos.

Tu y yo no podíamos imaginar que una forma de amar aparentemente “insulsa” y poco “sensual”, como aparenta el amor platónico, cuando llega sea tan fuerte como cualquier otra, ni que al hacerse patente su huella, sea tan imborrable como el amor más carnal y pasional. Nosotros pudimos experimentar muchas emociones platónicas llenas de realismo, en esa primera etapa, donde nada conocíamos el uno del otro.

En el amor, por lo general a los enamorados se nos mira desde el exterior con desconfianza y algo de crítica burlona. “Mira éste o ésta que colgado está por ese o aquella. Más parece un crio encaprichado que una persona con sentido común”. Que es el menos común de los sentidos. Dicho sea de paso.

Sentido común, quien lo necesita para amar, por otro lado imprescindible. Como nos empeñemos en alguien… en sus ojos… en sus palabras… en su sonrisa, o en su lo que sea que de ella/él nos guste…, este sentido común dejará de serlo, aunque más adelante encienda las alarmas. Saltar saltará.

El freno para frenar el dolor que el amor nos ocasiona, no siempre tiene el líquido a su nivel y nos lleva a la desesperación del frenazo, con su desilusión más genuina y básica en el chasis. Por muy maduros o mayores que seamos, o nos sintamos. Si Cupido no alcanza de lleno a nuestro amado/a, en el centro de su corazón, sin él estamos perdidos. Se nos cierran las puertas y ventanas del mundo. Las luces de nuestro alrededor parecen apagarse todas a la vez. Y solo vislumbramos en nuestra escena habitual, la obscuridad. “Afortunadamente no es nuestro caso Marisol.”

Un abandono sentido así, solo es comparable al que manifiestan los niños en su infancia por parte de alguno de sus progenitores.

Del amor lo esperamos todo, sinceramente. Nosotros como todos, deseamos que sea correspondido. Que ella/el vea por sus ojos. Oiga por sus oídos y sienta sus mismas emociones. Sin olvidar… pasión por el mismo deporte. Y a ser posible equipo, las compras, el mismo placer X, las mismas comidas etc.…etc.… Así, nos vamos poniendo la barrera, el obstáculo difícil saltar. Y no lo hacemos una única o primera vez por inexperiencia; todo lo contrario. Estas son las expectativas más vitales y las queremos ver cumplidas a lo largo de la vida.

Marisol, con amigos y conocidos ante sus confidencias, todos somos críticos de sus conductas” porque caen en ellas claramente” les decimos sin pudor. La venda es tan espesa, que no deja entrar luz, ni en los propios ojos.

¿Marisol con la edad qué aprende el amor? Creemos y esperamos que lo debiera saber todo. Esto también ocurre cuando le pasa al vecino, al tendero, a la modista o, a venerables ancianos/as. Un nuevo” a mí esto no me afecta” aparece.

Cuando nos enamoráramos y nos dejamos herir por la flecha envenenada errónea, que Cupido aleatoriamente, con los ojos vendados nos lanza, damos pena. “No sé si mi sincera opinión te está sorprendiendo, no es fácil para mí plasmarla en el papel; pero te aseguro que hablarlo de tu a tu me resultaba imposible. Deseo llegar a ti a través de mis sencillas palabras escritas”.

Cuando por vez primera se comprueba la verdadera fuerza del amor, . “Nosotros tenemos esa fortuna” , ¡es fenomenal! Pero como equivocado creas que conoces la pasión, y erróneamente, anteriores amores no la hayan despertado en ti a lo largo de la vida. Quizá ese día, tu amada/o te está ayudando a soplar las velas de tu noventa cumpleaños, o te hallas olvidado.

“Cariño, te confieso ilusionado que hasta ahora el desánimo no nos ha acompañado, ni la duda, ni la infelicidad”.

El secreto del amor solo el amor lo conoce. O quizá, ni el propio amor se haga del todo a la idea de cuál es su verdadera magnitud. Ni de la explosión que su carga supone y mucho menos los daños colaterales que esta detonación consigue, cuando pertinaces, se intercalan alegría y apatía.

Si el amado/a, no acude a la cita deseada, o lo hace, lo que nos hemos empeñado en llamar, con desapasionamiento, que viene a ser falta del mismo interés que nosotros hemos puesto, desasosiego en la voz, silencios, sequedad de garganta. Bien debido a timidez en la adolescencia, o a edades avanzadas, a pesar del aspecto juvenil y cuidado. Cuidado…Son muchos los símbolos y símbolos a interpretar, Marisol, es mucha la gimnasia mental que nos pide el amor; así y todo inocentes, se lo proporcionamos.

Equivocarse de forma continúa en tanta interpretación es inevitable. Se ensombrecen los colores de las mismas y se apagan. Van a ahogarse al fondo de unas aguas donde nuestra “imagen más querida” no se nos refleja. En cambio, la que nos ofrece la trasparencia de los mares, igual es nuestra cara más real, y a la vez desconocida.

Tú y yo a nuestros ojos, mares en calma, les revelamos la pureza de nuestras almas en cada mirada.

Tanta agitación como el enamoramiento produce, hace que seamos cocteleras de alto contenido peligroso. Esta mezcla de sensaciones: marea, agacha, aturde, disfraza, manipula la razón y la vergüenza. La poca y la mucha, es igual.

Para acertar en el amor, desde luego que se necesita algo más que amor. ¿Pero qué? Juventud, dinero, corazón, talento, trastorno, pasión, sorpresa, salud, emoción, experiencia, una canción, un Premio Planeta, un Premio Nobel, la belleza de Brad Pitt y Angelina Jolie juntas, un cerebro privilegiado, una cartera de acciones, una pinacoteca en Madrid, una casita en la luna, aunque sea de papel…

Marisol no lo sé, solo puedo decirte, que en este momento, intento ahondar más en la comprensión de las cosas que a los dos nos afectan. Me atrevo a conocerte más cada día, a pagar el precio que sea necesario para merecer tu confianza, a escucharte, a tener las manos abiertas y tendidas, a liberar mi ternura, a soñar a lo grande, A SORPRENDERTE. Un beso.

Cala

Posiblemente, la vida sigue

Amado Tu,

Hoy empezar es difícil, sacar esas palabras que presionan mi pecho, es algo mas que doloroso, quizas, decirlo implique, asimilarlo, tal vez la cobardía, no fue mi punto fuerte, a veces creo que me lanzo, mas sin miedo al vacio ni a caerme.


En ocasiones pienso que siempre te estuve esperando, desde niña, aún subida en esa inaccesible torre, en donde yo misma me escondía a veces. Allí me sentía libre, aunque sola y aturdida, pero tan lejos de que nadie pudiese dañarme.


Nada fue fácil, existen personas que buscan su sentido en el mundo, en el espacio, y le es tan difícil encontrarlo. Yo me sentía perdida, como el resto de mis días, y tu, amado tu, entrastes derrumbando las murrallas impuestas en mi corazón. Ni tan siquiera te llame, ni siquiera me dio tiempo a pensarlo, y ya era tuya, como de nadie. Me mostrastes esa pequeña ilusión por vivir, le devolvistes sentido a mis letras, fuistes la luz para mi sonrisa. Mi granito de arena de cada día, para construirme este inmenso castillo, que hoy se cae a pedazos cada tarde. Nos vamos labrando un destino, en ocasiones nos arriesgamos, la vida es un continuo riesgo, una lucha constante.


No sabes cuanto te hecho de menos, y no mas que al recordarte se dibuja una sonrisa en mis labios, aunque hoy viene acompañada de lágrimas, ese dolor aún hace eco en mi estomago.

Fue mi fallo necesitarte, no ponerle condición a mis sentimientos, pero recuerdas, nadie tiene un manual cuando ama, unos aman con la fuerza del sol... y yo te ame con las fuerzas del sol, aunque quizas aún te ame con las mismas fuerzas.


No sabes el vacio que me dejas, hasta esas inmensas nubes de las que tanto te hablaba, ya no tienen sentido, y no quiero subirme de nuevo a esa torre, y no hago mas que cultivar los jardines que la custodian. Mas bien quizas deba aceptar que no me amas, que fuistes un regalo en el camino, del que debo quedarme con las cosas buenas. Aunque aún es pronto, dejemos al tiempo hacer su acometido, pero quiero que pase y que pase, y todo se queda estancado en tu mirada, en tu cuerpo, en tus manos, donde pude sentir la mayor ternura del mundo.


Quizas haya querido golpearme la cabeza con todo lo que me encontrase a mi paso, dejar de respirar a cada instante, no ser mas que una maceta espuesta al sol, que ni siente ni padece, renegar de la existencia del amor, y no mas que me he convertido en un ser horrible, un ser que mas se llama ser porque respira. Pero todo duelo necesita su tiempo, y yo aún impaciente, no veo el día en el que acabe.


Que porque te cuento todo esto, porque tal vez necesitaba ser libre, enfrentarme a mis sentimientos, porque, me he dado cuenta de que no porque esta certeza que sentía y siento no haya sido correspondida, no significa que no fuera verdadera, porque se, que aunque no sientas lo mismo, algo nos unirá en el recuerdo para siempre. Y porque desde lo mas profundo de mi corazón, y de mis sentimientos, te deseo que esa felicidad que todo ser humano espera, si aún no la tienes, que te llegue pronto y que te acompañe para siempre.

Quizás ha llegado mi hora, y aunque con los pies descalzos envueltos entre poemas, recuerdos, y vivencias, todos ellos hoy me hagan una mujer mas fuerte, y sin rencor, aunque con dolor, mis profundas letras te digan, gracias por lo que me distes, por existir...hasta siempre en mi corazón, pero ahora tengo que seguir caminando, porque a lo que cerré los ojos tanto tiempo, hoy se que alguien me espera.

Luciernaga

La ausencia inacabada

Querida Eloísa;

Desde que,te fuiste de esta orilla de mi corazón, todo está anegado con escaparate de tu ausencia. Escribo tu nombre porque, en sus sílabas, reconforto a mi consuelo.

No hay nada ni nadie, que se parezca a ti, en este ámbito donde abrazo a tu silencio.


Sé de sobras, que, fue la distancia, la que te robó de mi entorno, con un adiós que, selló nuestros labios, con el beso interminable de la despedida.

El tiempo sin tu reloj, parece que no tiene prisa y, quiere devorarme, con su letargo de las horas.Todo está como, como enmudecido sin ese clamor sonoro de tus divinas palabras. Tus días de risa con esa primavera que, celebramos, cuando los almendros estaban en flor.

Mis ojos se inundan de tristeza, en su cauce de lágrimas que, a veces asoman de improvisa, sin poder reprimirla
s.

Te echo, cada vez más en falta y, mis manos son como la hiedra, queriendo enredarse en tu luz, en esta oscuridad que me tiene a solas con tu sombra.Sin tu regazo,
vivo el desamparo y, me falta esa cabecera de tu vida, para sostener a mi esperanza.

Te fuiste, querida mía Eloísa, atravesando el puente incierto de otros cardinales y con otra brújula. No te reprocho ni te inculpo por ello, porque sé que, tarde o temprano, volverás a ser lo que fuiste en toda mi ocasión, derrotando a ese olvido que, siempre acecha y el recuerdo lo derrota.


Querida como ninguna, Eloísa, mis noches sin tí, están como huérfanas y con un suspiro de estrellas.

Trasnochado asomo a tu lucero en ese enclave de entonces.....¿ Te acuerdas Eloísa ? Cuántas veces frecuentamos a su ruta, con un viaje de ida y vuelta . Ciegos por la pasión y el anhelo desenfrenado de lujuria celestial. Paraíso de aquel tiempo, sin la mirada de nadie, sólo el pulso de nuestro respiro y, el tálamo improvisado de la intemperie....

Todo eso y mucho más..., que nadie sabe a parte de tu corazón y el mío. Secreto compartido que atesoró nuestro destino y consolidó este romance, aunque ahora, de tu ausencia soy cautivo.Sé que volverás en cuanto puedas hacerlo, con todo tu esplendor de antaño y esa rosa de tu primavera.

Te esperaré en los andenes de esta soledad que, se multiplica sin tu comparecencia y, que en su nombre que es el mío, yo te reclamo para siempre, en este puerto de tu ausencia varada.

Toda tú, con tu plenitud de siempre, volverás a hacer tus maleta, pero, esta vez de regreso hacía mí, a este feudo que, se derrumba sin la columna o pórtico de tu sentimiento.


Pilar de tu agua cristalina que remansa a toda mi ardiente sed y, sube con tu gloria, por la fragua de mi alma.


Todo tuyo, ahora y para siempre, de éste que, te quiere como a ninguna y, sin límit
e del tiempo.

Romeo del Sur




Recuerdos en Blanco y Negro

Ya han pasado tres días. No puedo moverme. Mi voz ya no grita; sólo soy capaz de pensar. Escucho tenuemente tu sollozo lejano. Con los dedos de mis manos cuento una y otra vez hasta diez para conservar la conciencia. Deseo fijar esos diez recuerdos que consigan mantenerme vivo; asaltan mi mente en una extraña sinfonía en blanco y negro que invade mis sentidos:

Uno: Los manchones de tinta negra en mis manos, de la pluma con la que cada día te escribía cartitas de amor desde el pupitre de la última fila.

Dos: El contoneo de tus caderas, con la blanca cesta de mimbre en el brazo, camino del mercado de la fruta.

Tres: La orquídea en tu pelo negro, y el camisón de gasa que dejaba entrever tu impresionante figura.

Cuatro: La inocencia virginal de tu alma cuando hicimos el amor por primera vez.

Cinco: Las teclas del piano del viejo hotel de Puerto Príncipe, que oíamos desde la playa mientras nos bañábamos desnudos.

Seis: Las pequeñas lentejuelas de tu vestido de novia, que te transformaban en una Diosa de piel negra.

Siete: La almohada impregnada de tu perfume de jazmines.

Ocho: La cazuela de arroz con coco que preparabas cada domingo en la cocina de carbón del patio.

Nueve: Tus lágrimas de felicidad y mi suspiro de alivio cuando escuchamos el llanto primero de nuestra hija Blanca.

Diez: La sincera promesa de no abandonarme nunca que me hiciste dos días antes del terremoto.

Dejo de escuchar tus lamentos, querida esposa. El silencio me traspasa y hiela mis huesos. Cierro los ojos para encontrarme contigo y te imagino tendiéndome la mano con nuestra hija en el regazo… Uno, dos, tres…Dejo de contar.

SELINA

lunes, 8 de febrero de 2010

¿Amor u Odio?

Confesaba Platón que cuando el amor nos hiere, cualquiera se convierte en poeta, aunque nunca antes hubiese sido favorecido por las musas:

Mis manos frías son reflejo de tu ingrata frialdad. Mi cara sin expresión, cristalina a tu egoísmo y carencia de emoción. Mi profundo odio evidencia el amor frustrado hacia un ser maldito, cobarde, de corazón petrificado. ¡El fin de sus días a mi vida se ha adelantado!

Pedazos de cristales de espejos rotos que desgarran hoy mi interior, para recordarme poquito a poco que tú ya no eres nadie y yo una luchadora sin meta, ni gratificación. La falsedad te ampara y la verdad es sólo de aquellos que la quieren entender. La tristeza anida en mí, encontró el mejor refugio donde subsistir.

Los remedios, los consuelos ya no existen en este derrotado porvenir. Me quitaste la vida. Exigencias del guión, que hoy, como el buen escritor te ruego que devuelvas sin retraso ni compasión. Sin tardanza, ni ruegos de perdón.

Gesticulas y no consigo averiguar a qué juegas con mi desdichada desolación. ¿A qué juega el agua cuando se derrama y evapora? Perdiéndole la vista hasta el día en que ella quiera volver, hasta el día en que ella de nuevo se volverá a perder.

Ahondas en la herida sin cesar, como el goteo continuo del grifo mal cerrado. No consigo comprender quién se ríe más de mí, ¿quién se ha burlado más? Tú, o el destino sin compás.

Cuando el orgullo desespera, cuando el rencor nos hace gritar, es sin duda el amor que te profeso el que obligada habré de ocultar.

Añoranza estúpida que aún te guardo cuando ya tan sólo eres parte del olvido más lejano. Olvido, que no regresa y que sin embargo nunca se fue, nunca fue en vano.

Rosa de los desiertos

domingo, 7 de febrero de 2010

Mi vida

Mi vida...¡Te quiero...!.
Te quiero y mi camino sólo tiene una verdad y un destino...TU.

¡Que suerte haberte encontrado mi vida! Tú, el ángel que llevaba en lo mas profundo de su corazón los sentimientos mas valiosos encima de la tierra. El que a pesar de la distancia desde que apareció en mi camino no hubo ni una noche en la no fuera su sonrisa la que me cubriera de besos antes de irme a la cama, el que con sólo una mirada era capaz de alentarme y darle fuerzas a ésta frágil mariposa que tanto le costaba volar.

Tú mi precioso tesoro, con esa magia que te envolvía fuiste capaz de obrar éste milagro, con la complicidad del tiempo, la dulzura de tu mirada, la constancia de tu cariño, la nobleza de tu persona, la belleza de tu ser y la sinceridad de tus palabras hicieron que dejara de ser yo, para empezar a ser parte de tí.

A tu lado me sentí la princesa en un cuento de hadas que tú habías escrito para mí... a pesar de las dificultades en todos sus capítulos siempre había un final feliz...junto a tí, junto a tu sonrisa, acariciada por tu cariño y siempre bajo tu protección.


Hay cosas que jamás podré olvidar...aún recuerdo con ternura y emoción el día que nos conocimos, el día tan soñado para ambos, el día en que no hubo distancia ni barrera que pudiera frenar el torrente de sentientos que habían florecido dentro de nosotros meses atrás.“Para siempre...” “Si besas mis labios éste amor será para siempre...” y nuestros labios tímidos se unieron por primera vez alcanzando tantos y tantos sueños tejidos.

Hoy en mi soledad...Los recuerdos me arañan y me arrastran a sentir la calidez de tus manos, a sentir como se perdían en mi cuerpo dibujando los matices de tu deseo, mientras mis labios se posaban en tu pecho, desesperados por acariciar el ángel que voló de la tierra de los sueños, para ponerse frente a mí e impregnar mi ser con todo su amor.

No se como ni cuando me robaste el corazón pero hoy cariño yo me arrodillo ante tus sentimientos y te suplico mi vida que ¡Jamás dejes de iluminarme con tu sonrisa!, pues cuando me miras y me iluminas con tu sonrisa es como si el arcoiris brillara solo para mí. Jamás un hecho que puede parecer tan simple y cotidiano había significado tanto. Tu gesto me transporta a sueños con olor a miel, me hace volar a horizontes donde jamás llegué.


Me miras con tanta dulzura, con tanta serenidad, con tanta ilusión, con tanto deseo... que me haces llegar a dudar que este viviendo una realidad. Siento como mi corazón se encoge ante ti, siento como se estremecen todos y cada uno de los poros de mi piel...

Es entonces cuando todos mis sentidos se despiertan, y me asaltan las ganas de ir corriendo a buscarte para calmar las ganas infinitas que siento de ti. Las ganas de ir y envolverme contigo en una tormenta de caricias y besos, poder pasear mis labios por tu piel, esa piel que se adueñó de mí, quisiera poder clavar mis ojos en los tuyos y que sintieras todo el amor que siento por ti, por ti mi vida.

Te amo con un amor tan grande y especial que ni yo misma sé donde está su límite... pero de lo que sí estoy segura es que tú eres el protagonista de toda esta locura tan maravillosa que llena mi corazón.

Y escúchame bien mi preciosa estrella y recibe el regalo de éstos versos que hoy escribo para tí... ¿no te das cuenta...?¿No ves como me muero por tí?,

¿No ves las ganas infinitas que tengo de besar tu corazón...?.
Quisiera tener el poder de volar hoy de nuevo hasta tí y envolverte como el viento y robarte para siempre,
para que estuvieras junto a mí...
para que jamás me volviera a sentir como ahora... pues tengo el sentimiento de una flor muerta.
Aunque vives constantemente en mi pensamiento,
tu ausencia, mi vida, es una carga demasiado pesada para mí.
La sangre que corre por mis venas grita tu nombre desesperada,
las palabras se deslizan por rios de lágrimas buscando el consuelo de los recuerdos tan maravillosos y especiales que sembraste en mí.
Los mismos en los que ahora me ahogo en mi propia soledad.
Porque te extraño mucho mi amor...

Mi vida, porque siempre has sido y serás eso...MI VIDA...Mientras quede un halo de esperanza en mí en mí...no ha de faltar en tu alma ni en tu corazón, un motivo para soñar, un sentimiento de grandeza en tu persona, ni una razón para sonreir, porque la magia y la belleza del universo se resumen en tí.

Otro pedacito de mi alma para la estrella mas bonita y dulce de todo el firmamento. “Ni siquiera sé si existe algo tan mágico y perfecto pero yo...esté donde esté...en mi fantasía o realidad...YO... le AMO”

Rosa de los Vientos

sábado, 6 de febrero de 2010

Aún te recuerdo

¿Recuerdas mi estúpida obsesión por soñar? Llegaste a insinuar que acabaría convirtiéndose en mi mayor enfermedad. Sin que sirva de precedente debo darte, en parte, la razón. A medida que interiorices el sentido de estas líneas comprenderás que sigo siendo la misma y que aún te amo por encima de cualquier fuerza sobrehumana. Aunque me he visto forzada a controlar la situación, a manejar mis mayores temores a mi modo. No te estoy pidiendo permiso ni comprensión. Nunca lo haría. Como siempre mi egoísmo me ha llevado primero a pensar en mí, pero sí al menos una aprobación.

Hace horas, días, meses…que no nos vemos. No se trata de materializar el tiempo sino de asumir que la espera se hace eterna. Entendí que mientras regresabas, mientras volvías a mis brazos, sería mucho más romántico e idílico reinventarte a mi manera. Eres consciente de que nunca he soportado tú carácter efervescente, tu prepotencia, ni aquellos besos que me vuelven loca. ¿Por qué no pensar que sí que estás conmigo, que somos felices, que me aceptas y que me quieres casi tanto como yo a ti? Quizás sea una osadía por mi parte, delirios que me permiten ser feliz, sobrevivir. Pero es duro admitir que ya no estés a mi lado.

Decidí que de un modo u otro me acompañarías en todas mis actividades. El primer paso fue apuntarnos a clases de yoga, sí, a yoga. Pensé que para reinventarte sería mucho más sencillo comenzar en algún lugar, de los pocos que quedan, en los que no tuviésemos que darnos explicaciones ni hablar. Sólo observamos y respiramos. Respiramos profundamente. A veces me estremezco cuando siento tu aliento en mi espalda.

Ayer, sin ir más lejos, acordamos ir al cine. Por supuesto, elegí yo la película. Ésta vez no tuviste fuerzas para discutir. Compré dos enormes cubos de palomitas y un litro de coca-cola con dos pajitas. Cuando llegué me indigné muchísimo. Nada más sentarme, una chica empezó a gritarme como una histérica para que quitara todas nuestras pertenencias de su supuesto asiento. Yo perdí los nervios por completo. Le dije que si es que no te veía, que mi novio estaba sentado en su sitio porque habíamos comprado las entradas o si acaso me veía tan caprichosa para ir ocupando asientos a mi antojo. Sin ningún tipo de remordimiento, el acomodador me invitó, bueno, nos invitó a abandonar la sala. Me sorprendió tu actitud cobarde. En otro tiempo me hubieses defendido.

Cocino para dos, preparo la mesa con el doble de tenedores, platos… Pero últimamente no comes nada, no pruebas bocado. No me extraña que conserves también la línea. Sólo te molestas en escuchar atentamente el telediario y mis pequeñas anécdotas, sin reproche alguno. En ocasiones resulta tan aburrido…

Los viernes por la noche nos encerramos en aquel pequeño bar escondido de la ciudad con tanto encanto. Hablamos de música sin parar, debatimos sobre el individualismo, política mientras nos aferramos a nuestros gin-tonics y a la desoladora realidad. Como un peso en mi espalda noto como la gente nos observa y habla en voz baja sobre nosotros. En ese momento es cuando me doy cuenta de que formamos una pareja preciosa y qué se mueren de envidia.

De vez en cuando tengo pequeños brotes de realismo. Los odio, los odio con toda mi alma. Me hacen sufrir. Me recuerdan que estoy sola. Es cuando agarro tu móvil, el que dejaste olvidado en la mesilla de noche y me escribo hermosos y poéticos mensajes de amor. Cuando mi móvil suena y veo reflejado tu nombre en la pantalla, tiemblo. Y apenas sin fuerzas, caigo rendida al suelo, apoyada en la pared que aguarda mis pesares, mis frustraciones. En esos momentos lloro enredada a mis piernas, con la leve esperanza de que cruces la puerta, te sientes conmigo y me abraces muy fuerte mientras me dices lo mucho que me necesitas, tanto como yo a ti.

Me ofreces tu mano con delicadeza y te acompaño a la cama, para dormir ladeada para que sientas que tu hueco aún sigue vivo.

Debes entender que nadie me pidió permiso para despedirme de ti. Que me sentí obligada a besarte por última vez tras aquel frio cristal de la caja de tu última morada. No te estoy pidiendo permiso. Sólo quiero que comprendas que cuando nos conocimos me propuse amarte hasta el fin de mis días, me acompañes o no en esta dura travesía. Y fiel, cumplo mi misión.


Dedicado a los amores que de un modo u otro se encuentran ausentes.

UMBRELLA

viernes, 5 de febrero de 2010

Siempre a tu lado

A los doce años te conocí y no pude resistirme a tu poder de atracción. Lo que en un principio fue como un flechazo, poco a poco, con el trascurrir diario, se ha ido consolidando como un gran amor sin fisuras, como una unión cautivadora... Ya llevamos veintitrés años juntos y sigo tan ilusionado contigo como el primer día....

En mi época de estudiante, junto a algunos de mis compañeros más cercanos, al salir del aula, en el parque colindante con el colegio, pasabas de mano en mano. Dabas la sensación de que lo que te importaba era hacernos despertar a los placeres de tu incipiente seducción, tan atrayente que eras capaz de satisfacernos a todos, en un espacio muy breve de tiempo. Tengo que reconocer en honor a la verdad, que fue bajo mi consentimiento y complacencia. Si te soy sincero, la palabra celoso no tiene cabida en el diccionario de mi vida. Nunca me ha importado compartirte. Jamás sentí miedo a perderte, porque enseguida me percaté de que yo era el que mejor te acariciaba, el que más te hacía vibrar...

Incluso hubo un día en que mis amigos de clase perdieron todo el interés por ti, por lo que ya dejaste de ser solicitada por ellos. Pero tú y yo, nos seguíamos viendo a solas, cuando los deberes del colegio me concedían un respiro.

Después de la adolescencia, me fuiste cautivando por completo, hasta el extremo de que ya me eras indispensable y no podía prescindir de ti ni siquiera un día. Te sentía en lo más profundo de mí, como ahora mismo...

Contigo, mi amor, voy a todos los lugares del Planeta. Nunca te opones a nada. Incluso, algunas veces, pecas de sumisión. Y, a tu lado, sé encontrar muchos momentos mágicos e inolvidables.

Recuerdo los veranos de las prolongadas vacaciones escolares. Nuestros encuentros se producían en la dorada arena de la playa, oteando la belleza del horizonte en el ocaso del día. Las sillas, las sombrillas y las hamacas quedaban huérfanas. La playa parecía un desierto inmenso. Entonces, junto a ti, mi amor, llegaban mis momentos de máximo disfrute en los que disponía de todo mi tiempo para ti... No sólo para acariciarte, sino para, al unísono, contemplar los acantilados más próximos y observar con detenimiento cómo el azul se desbarataba en espumarajos efervescentes, cómo las rocas desguazaban el mar en jirones de seda blanca...

Poco después, mientras te seguía sintiendo, me quedaba embelesado contemplando puestas de sol de postal, donde el crepúsculo se teñía de rojos-púrpuras inverosímiles, entremezclados con anaranjados, amarillos...

Durante los meses de primavera y verano, también solemos pasar días de ensueño, lejos de la mar, en pleno monte, aspirando el perfume con el que nos obsequian las múltiples flores silvestres, y observando la belleza del aleteo de un sinfín de mariposas multicolores... Lo único negativo de ir al campo contigo, mi amor, es que suelo acabar agotado, sudando la gota gorda; porque te has acostumbrado a que te mime en demasía, a que te lleve a hombros y, aunque puede parecerlo, no eres tan liviana... Una vez que llegamos a la cascada, nos solemos tumbar un rato sobre el césped para escuchar la risa de las gotas de las aguas deslizándose bajo sus ritmos entrelazados, y admirar sus aguas burbujeantes, apercibiéndonos de los cantos rodados brillando y de las frescas plantas verdes de los alrededores, sintiéndonos invadidos por una sensación de inmensa felicidad. Luego, me veo recompensando sobradamente contigo, en todos los sentidos... Ya que tú, al ser mi fuente de inspiración, propicias que te cante al son de acordes aún no inventados. Y con la relajante guinda compuesta por el repertorio de los trinos de los pajarillos, haces que culminemos hasta la plenitud, convertida en bellas composiciones melódicas en medio del bucólico entorno de la naturaleza.

Por la noche, con la luz de la mesilla como única testigo; las estrellas, luciendo en el cielo; y la luna llena, iluminando la ciudad; nos vamos a reencontrar en un recogimiento místico, amiga del alma. Porque tu cariñosa presencia me hace sentirme en otra dimensión... Después, dormiré, porque ya sabes que sólo duermo si estás a mi lado; no existiendo la soledad cuando te tengo cerca. Serás mi amor hasta el final de mis días...
Ya sabes que en los días de crudo invierno en que se desatan relámpagos, truenos y granizo, me inunda la melancolía. Y si, a lo mejor, como consecuencia de mi estado anímico alicaído, bebo alguna copa de más, nunca te enojas, jamás me reprendes..., porque sabes que siempre me tendrás obsesionado. Tú eres como una tabla de salvación, en la que hallo refugio y cobijo, mi amor. Y ahora, que cada vez se prodigan las rupturas y divorcios, a ti, mi amante constante, sí te diría bien alto y sin miedo un: “¡sí quiero!” para toda la vida, con la convicción y certeza de no equivocarme.

Hasta luego, mis entrañables voces de la escala musical: ¡do!, ¡re!, ¡mi!, ¡fa!, ¡sol!, ¡la!, ¡si!, ¡do!..., mi inseparable instrumento de seis cuerdas, mi queridísima GUITARRA.

ALBERTO

El amor no tiene límites

Llega el día de San Valentín: Mi corazón no se siente solitario. Muchos recuerdos del ayer, compensados con añoranza todos en una flor.


Tengo mis cuatro hijos que junto a mi persona formamos ese compendio de amor reunidos todos ellos como pétalos de esa flor que hablo anteriormente y que llenan de alegría mi vid.


Junto a todos , varios ramilletes formados por sus retoños que me dan calor y felicidad.


A veces , sueño despierta y..., me siento, como barco que navega a buen puerto donde espera encontrar su sitio para después seguir navegando con más fuerza.


El amor , no es solo la pareja unida por dos personas que se quieren ; esto puede o mejor decir, terminar porque el tiempo así lo decide.


El AMOR con mayúscula tiene un campo más grande de acción : es todo lo que te rodea y que lo ves con cariño y admiración.


La atmósfera sana y limpia de los seres que amas y que recíprocamente ellos te dan amor.


Es digno de amor , el campo, la Naturaleza en general , las flores, animales, el agua de las fuentes, la inmensidad de los mares con ese oleaje que el agua salpica cual espuma de encaje adornando sus arenas y anima al despertar de cada la llegada de un día nuevo. Todo aso con Mayúscula es (Amor).


¡Qué felicidad cuando sabes vivir esa plenitud llena de amor que te invade el alma!


MARAZUL

La palabra mágica

Anoche soñé contigo. Tú, de espaldas a mí, descansabas tu cabeza sobre mi pecho, cerrabas tus ojos y te entregabas a mis mimos, mientras te acariciaba tu pelo negro y ondulado, era una escena enternecedora.

Yo te había esperado durante toda mi existencia, no te conocía, pero te quería, sabía que serías tú el que cambiaría mi vida, el que me diría muy quedo, al oído lo que yo deseaba, aquella palabra mágica que de niña no escuché y que tanto anhelaba oír.


Hoy, pasados muchos años, tu pelo negro y ondulado ha desaparecido. Los dos hemos cambiado, pero al cabo de un tiempo en el que te costaba mucho expresarte y demostrar tus sentimientos, (quizás porque en tu niñez tampoco la oíste nunca) has aprendido a decirme la palabra mágica.


Por fin has conseguido a decir... Te quiero.


LIBERTAD

lunes, 1 de febrero de 2010

El Trebol de Cuatro Hojas

Adorada Isabel:

Hoy he vuelto a nuestro pueblo. Nada ha cambiado. Llovía incesantemente y he sentido en mi rostro el sabor del aire limpio y el olor de la tierra mojada. Sin aliento y sin vida he caminado por empinadas y angostas callejuelas para llegar hasta la iglesia y volver a imaginarme contigo… amándote en silencio en la misa de los domingos, embriagándome de tu aroma a romero y aliño de aceitunas frente a Jesús Nazareno. Tus negros ojos traspasaban el enlutado velo de encaje, culpables por imaginar momentos de pasión secreta que nunca llegarían.


jueves, 28 de enero de 2010

Decálogo para escribir cartas de amor

1. Pensar desde qué estado anímico se va a escribir: rencor, euforia, tristeza, desamor, nostalgia... Hay que tener en cuenta, también, que resultará más fácil confeccionar una carta de amor que se ajuste a los sentimientos actuales del autor.

2. Imaginar al destinatario de la carta (sea una persona real o un personaje inventado). No hay que perderlo nunca de vista mientras se está escribiendo.

3. Inventarse una situación determinada en que se enmarquen el estado anímico y el destinatario de la carta de forma verosímil: el narrador acaba de romper con su pareja y desea una reconciliación; lleva veinte años con la persona amada y la carta es un regalo de aniversario; adora en silencio al destinatario de la carta y se decide por fin a revelarle su amor; etc.

4. Buscar una continuidad y un encuadre para el contenido de la carta. No basta hablar de sentimientos: hay que situarlos en unas circunstancias espacio-temporales precisas.

5. Acertar con palabras concretas para expresar los sentimientos, echando mano de metáforas, comparaciones, acciones, gestos, detalles físicos o ambientales. No acudir, a menos que sea absolutamente imprescindible, a palabros como AMOR, FELICIDAD, PROFUNDIDAD, HONDURA, SUFRIMIENTO, etc.

6. Cuidar meticulosamente el lenguaje: no usar ─a menos que se recurra a la ironía─ frases hechas, expresiones cursis, estereotipos amorosos... Tampoco hay que dejarse llevar en exceso por el lenguaje poético, que junto con el tema puede crear un conglomerado bastante empalagoso.

7. Tener mucho cuidado con el tono. Es muy importante que el discurso, por medio de las palabras seleccionadas, acerque al lector al estado de ánimo del narrador. Ejemplos: uso de diminutivos y un lenguaje llano si la carta está escrita desde la confianza; frases cortas y secas si está escrita desde el rencor; etc.

8. Ser consecuentes, sinceros y profundos en cuanto al sentimiento que generó la carta. No hay que quedarse en la superficie del estado de ánimo (alegría, pena, melancolía...), sino ahondar en las contradicciones que todo sentimiento conlleva.

9. Buscar un hilo narrativo, por sencillo que sea. Se necesitan acciones, objetos y hechos para expresar los sentimientos con eficacia, así que mejor proveerse de una secuencia que permita desenvolverse de un modo concreto.

10. Tener en cuenta que una carta de amor literaria ha de ir dirigida a dos lectores diferentes: al supuesto destinatario de la carta, y al lector real que la tiene delante. Hay que incluir la información suficiente para que cualquier lector sepa encuadrar la situación que se le describe, pero no tanta o de tal forma que sea evidente que el narrador le está dando datos dirigidos a él, y no al supuesto destinatario.

Bases del Concurso

1.ª Las cartas han de presentarse antes de las 19.00 h (hora española) del domingo,28 de febrero de 2010.

2.ª Se admitirá un máximo de una carta por participante.

3.ª La extensión máxima de las cartas será de 1500 palabras (para contarlas en el procesador de textos Word u OpenOffice, acudir al menú "Herramientas", y abrir "Contar palabras").

4.ª Podrán participar todas aquellas personas que tengan acceso a Internet desde cualquier lugar del mundo, sean ususarios registrados del portal Guadalinfo y siempre que las cartas estén escritas en español.

5ª Las cartas deberán ser inéditas, no haber sido presentadas a otros concursos y estar firmadas con seudónimo.

6ª. Las cartas se enviarán antes de la fecha límite, en formato digital (Word u OpenOffice) al correo electrónico cartasdeamorguadalinfo@gmail.com. Para participar, será obligatorio cumplimentar los siguientes datos: nombre, apellidos, correo electrónico, ciudad y país de residencia del autor/a, pseudónimo con el que se ha firmado el mismo y título de la carta. Los miembros del jurado recibirán únicamente las cartas firmadas con pseudónimo. El resto de los datos se archivará en una base de datos a la que, hasta el día del fallo, solamente tendrá acceso el secretario del concurso.

7ª. El fallo del jurado se hará público el lunes, 15 de marzo de 2010.

8ª. La Organzación del concurso se reserva el derecho de modificar o ampliar las presentes bases.

TEMA

El AMOR en todas sus variantes y sucedáneos: verdadero, platónico, enamoramiento, desamor, pasión, odio, enganche, posesión, celos, deseo, sexo... Por otra parte, la carta puede estar dirigida a cualquier destinatario: un personaje imaginario, sí, pero también a tu esposa, tu padre, tu amante bandido, Elena Espinosa, la novia de tu hermano, la cuesta de enero, el Amazonas, la tumba de Napoleón, la biblioteca de Alejandría, los ojos de Elisabeth Taylor, las orugas del jardín, un marciano, la isla de Pascua, los regates de Messi, Lula Da Silva, José Luis López Vázquez, tu peor enemigo o las velinas de Berlusconi.

DOTACIÓN

Se estableceran tres premios, uno para carta ganadora de usuario local, otro para la carta ganadora para usuario no local y, un tercero, para la carta ganadora por votación popular en el blog. El autor de la carta ganadora Local recibirá un premio consistente en una cámara de fotos digital, un libro a elgir entre una serie de títulos propuestos y la participación gratuita en una actividad de senderismo por el Pinsapar del Parque Natural Sierra de Grazalema. El usario no local ganador recibirá como premio un fin de semana en Ubrique para él y dos acompañantes, un libro a elgir entre una serie de títulos propuestos y la participación gratuita en la actividad de senderismo descrita anteriormente. El usuario ganador por votación popular recibirá un lote de libros.

Así mismo, se estableceran otros tres premios, uno para usuarios jóvenes de 15 años, un segundo para jóvenes de entre 16 y 55 años y, por último, un tercero para jóvenes de más de 56 años, dotados todos con un lote de libros.

JURADO

1. El Jurado estará formado por escritores, profesores de lengua y literatura, y técnico designado por el Ayuntamiento de Ubrique .

2. El fallo del Jurado será inapelable, quedando facultado también para resolver cualquier otra incidencia que pudiera producirse y que no esté contemplada en las bases.

3. El concurso no podrá ser declarado desierto.

4. La participación en este concurso implica la aceptación de las presentes bases.

Si quieres saber más sobre cómo escribir una carta de amor pincha accede a éste decálogo haciendo clic aquí (www.escueladeescritores.com).

Para dudas respecto al concurso, puedes ponerte en contacto con el secretario del mismo: José Luis Aránegas, en el correo cartasdeamorguadalinfo@gmail.com.

Binevenid@s

Hola a todos y todas.

Ya se que vamos ajustadillos de tiempo pero, no quería dejar pasar esta oportunidad para convocar este I Concurso de Cartas de Amos en Guadalinfo.

En principio, ésta iba a ser una actividad local pero, por indicación de algunos compañeros, al final hemos decidido abrirla a todos los usuarios y usuarias de los Centros Guadalinfo de Andalucía.

Aunque muchas veces por vergüenza por miedo o por temor al ridículo las cartas que escribimos no vean la luz ¿quién no ha escrito alguna vez una carta de amor…? Así que vamos a la tarea.

Love is...
© I Certamen Cartas de Amor en Guadalinfo - Template by Blogger Sablonlari - Font by Fontspace - Blogger Styles